Etiqueta: Vuelta al mundo
Vídeo Australia, Agosto 2008
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Vídeo Indonesia, Julio 2008
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Vídeo Tailandia Malasia, Junio 2008
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Como no, no he podido resistirme a poner la canción del verano…
Vídeo Camboya, Mayo 2008
Por el sud de Laos, hace un poco más de un año los tres Willys entraban en Camboya. Lo que tenía que ser un país en el que estar de paso se convirtió en una agradable sorpresa. Pues, aunque el complejo de Angkor haya sido seguramente el monumento humano más espectacular que hayamos visto en esta vuelta al mundo, Camboya es mucho más e intentamos resumirlo en este vídeo.
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Los fragmentos de vídeo del principio y el final corresponden a una fiesta que nos encontramos en un pueblo perdido en la región del Ratanakiri. La historia de como acabamos allí y de que iba la fiesta está en el post ¡LA FIESTA!
Vídeo China, Marzo 2008
Para ir calentando motores mientras esperamos la inminente marcha de tres nuevos willyfogs a principios de junio, vamos a intentar publicar cada semana un vídeo resumen de cada país en el que hemos estado.
¡Qué dolor! Ver estas imágenes y pensar que hace más de un año estábamos empezando el viaje… Pensar que nos quedaban 12 meses por delante…
Las estrellas del Rock somos así…
El desierto australiano nos fascinó desde el primer momento y desde el principio lo asociamos a una canción. Cada dos por tres nos venía a la cabeza y empezamos a gestar la idea de hacer un videoclip de la canción… Pues ahí va nuestra ida de olla. La canción es de Neil Young y aparece en la banda sonora de Dead Man, una gran película de Jim Jarmush con Johnny Depp de protagonista.
He de confesaros que nos lo pasamos en grande tanto gravándolo como montándolo. ¡Qué recuerdos!
Vídeo Vuelta al Mundo
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Una vuelta al mundo de un año es difícil de resumir en un vídeo… Pero hemos intentado transmitir como vivimos durante esta maravillosa época. Esperamos que este vídeo anime a muchos a partir algún día.
DF, Distrito Federal, Dominio Familiar, Destino Final
Rodrigo y yo estuvimos en el DF 9 días, acogidos con alegría en casa de mi primo Alejandro, compartiendo el piso con Ixmene (su novia) y Nanu su mascota. Estuvimos de maravilla y cuándo su apretada agenda de cirujano se lo permitía, Alejandro nos acompañaba de visita o a cenar a unas taquerías de las que el simple recuerdo me hace la boca agua… (Volcanes o tacos al pastor Rodri? Bueno la gastronomía en México es capítulo a parte a ver si Rodri se anima).
También me reencontré con mi hermana a la que había dejado, justo un año antes en China, al inicio de esta vuelta al mundo (se me encoge el corazón al escribir esto, principio y final, ashes to ashes…), con mi madre y mis tíos franceses a los que también llevaba una buena temporada sin ver.
Por primera (y espero que última) vez en mi vida me subí a un bus turístico ese que parece un descapotable gigante lleno de borregos con cámara, pués ese, ya que así acompañábamos a la familia. Me pareció carísimo y las explicaciones del audio insustanciales, la única ventaja fue poder ver una parte de la ciudad rápidamente y saber que queríamos volver a un par de barrios en otro momento. Rodri y yo lo dejamos en el centro ya que se nos da mejor el acercamiento peatonal.
El palacio de bellas artes
Rodri soñando con una estatua que os recordarà algo pero que este año no saldrà mucho por televisión…
Interior de la casa de los azulejos, hoy un acogedor restaurante
Una de las cosas que chocan en el centro de la megalópolis es su fragilidad, Tenochtitlán, construida sobre un lago, se hunde, y al rededor del Zócalo (el centro de la ciudad) las señales de este hundimiento son múltiples. En la catedral la cuesta casi se parece a un pequeño turmalet y fuera las casas torcidas abundan.
La catedral en el Zócalo, no se aprecia pero de cerca el hundimiento es bárbaro
Una de las calles del centro histórico
Hay cientos de colonias (barrios) en el DF y muchos interesantes, la Condesa con sus bares y restaurantes, la Zona Rosa, llena de tiendas y bares, algunos subiditos de tono, el Centro con muchos edificios históricos además de la pirámide emplazada en el centro del universo según los aztecas fundadores de la ciudad…
Cervecita en la Condesa celebrando el reencuentro con Marisol
Fuimos a pasar un día a Chochimilco, en unos canales que ya crearon los Aztecas al ir secando el lago, los barqueros empujan con destreza unas barcas coloridas llenas de locales y foráneos en una tarde de domingo. Durante el paseo se acercan otras barcas en las que circulan vendedores ambulantes, músicos o Mariachis que por un módico precio te venden unas chelas (cervezas), esquite (maíz hervido con chile y queso), o tocan alguna ranchera con la marimba o cantan alegres canciones mejicanas que todos coreamos a peligro de perder la voz una vez perdida la vergüenza!
Las coloridas barquitas en un domingo muy concurrido
Fuimos al fantástico, enorme y extenso museo de Etnología de la ciudad, a las imponentes pirámides de Teotihuacán, al Copacabana a comer tacos y a muchos sitios más… Por cierto subir a las pirámides cuesta lo suyo que a 3000 metros de altura encarar las empinadas escaleras no es moco de pavo y menos para mi tio de más de 70 años que subió como un jovenzuelo! Ole por él!
En el museo, Rodri y mi primo Sebastien con la impresionante pérgola al fondo, se sostiene con un solo pilar central
Si no me equivoco en la segunda pirámide más alta del mundo después de Keops
Ro en la kilométrica calzada de los muertos
Ro haciendo el Azteca o el Griego o más bien el orangután
Por fin llegó el fin de semana y con él nuestra excursión a Cuernavaca, en las afueras del DF y dónde el domingo se celebraría el bodorrio. Tarde noche de sábado de relax en un hotel 4 o 5 estrellas (lujazo de este año) intentos fallidos de no acabar con el exquisito bufé libre de la cena y sobretodo en el desayuno (reservándonos para la boda) y tunning de los mochileros tirados en galanes latinos.
La verdad es que con el traje que nos llevó mi madre de Barcelona el cambio de un año de ir con unos vaqueros, unos tailandeses o un bañador y 4 camisetas fue importante…
La boda, al aire libre y con un calor de aquí te espero, se desarrolló bajo lo previsto, a saber, novia guapísima, novio sonriente a lo moderno con barba de dos días, damas de honor guapísimas (sin deslucir a la novia), algunos de los invitados macho con guayabera una camisa genial y mucho más ligera que la camisa y la chaqueta de rigor, la mayoría de las invitadas hembra casadas o en vias de, dijeron que sí, besos, abrazos, felicitaciones, mariachis, aperitivo, boda civil en la que servidor hizo de testigo (eh, que solo había 11 testigos más!), comida, actuaciones, lágrimas, vals con el padre de la novia, café-puro-barra libre descontrol y bailes regionales.
La verdad es que fue un exitazo nos lo pasamos en grande y hasta acompañamos a los novios a su hotel que quedaba en cuenca por lo menos.
El domingo despertar bastante tempranero, aprovechamiento del bufé hasta la cuarta ronda de rellenado y seguidamente vida familiar cerca de la piscina.
Por la tarde vuelta a la urbe y a la cama prontito que el lunes era nuestro último día en DF de allí nos íbamos a Cancún pero eso ya es otra historia.
Os había hablado de mi familia?
En casa de Mac!
Ya llevamos un tiempo insistiendo, en el viaje uno de los mayores regalos que vamos atesorando es la gente que vamos cargando en la mochila junto con los paisajes o las imágenes imborrables, si además un personaje como Mac te ofrece su HOGAR (así con mayúsculas) entonces el cócktail es perfecto!
En Tulum conocimos Juliane, esta, nos dio su teléfono, llamé y con solo decir que éramos los amigos de Juliane Mac ya me estaba dando su dirección.
Salimos de Palenque y pasamos la noche en el bus, encontramos la casa y a Mac junto con Mike (su compañero) que iban y venían cargando arena así que nos saludamos, tiramos las mochilas en un lado y nos pusimos a ayudarles.
En el couchsurfing (aunque Mac no pertenece al grupo) de lo que se trata es de compartir, experiencias, cocina, música, o lo que sea… así que no dudamos en ponernos a cargar o a cocinar o a disfrutar de su casa!
Mac nos dijo que nos instaláramos, que su casa era nuestra casa y no sabéis que acogedora se nos hizo!
Os la muestro un poco:

Esa misma noche ejerció de buen anfitrión y nos llevó a una fiesta, un encuentro en casa de Marc y Rolando dos couchsurfers curtidos que acogían a 7 personas en su casa y que nunca suelen tener a menos de 3!
Cómo os podéis imaginar el ambiente era una maravilla, viajeros y locales cocinando sus especialidades, una guitarra, unos tambores, cervezas y algún que otro tequila amenizaron una noche que se alargó.


Ya estábamos integrados en San Cristóbal de las Casas, conocimos a foráneos afincados y a locales acogedores.
Visitamos la ciudad y alrededores como nos cuenta Rodrigo y cada noche regresábamos a casa con la sensación que estabamos en nuestro propio cuarto! Cocinamos, vimos películas de DVD, simplemente daba gusto llegar a casa!
En casa de Mac el segundo día se montó una timba de mucho cuidado, cada miércoles convoca a sus amigos y se ponen a jugar al Póker, se juegan 25 pesos por partida (poco más de un Euro) y solo puede ganar uno, que se lleva todo el bote, tienen fichas como en Las Vegas y hasta el James Bond de «Casino Royale» estaría nervioso en esa mesa! La verdad es que es muy divertido y obviamente el ambiente es de distensión total!
El Jueves, para que no parezca que lo único que hacemos es dedicarnos a comer, beber y a la ludopatía estuvimos en la presentación de la revista «Arroz», una revista que nada tiene que envidiar al famoso «Time Out» recogiendo todos los eventos culturales que se celebran cada quincena en San Cristóbal, obra de Kate una Americana afincada en la capital de Chiapas. Hubo música en vivo, bohemios y artistas y sí también un poco de cerveza y de vino…

El Viernes, nos acompañó a un bonito pueblo llamado San Juan Chemula. Su buen hacer con la fotografía, así como su gran humor hace que pasear con el sea de lo más divertido. Y por la tarde…
Por la tarde teníamos que irnos pero de pronto, con la mochila ya cerrada y a punto de cargar a la espalda nos dijimos que «al carajo!» que nos quedábamos un día más… así que nos sentamos de nuevo y a charlar con Mac delante de su chimenea, un gustazo!
Si la despedida fueron grandes abrazos, que menos que estas grandes palabras para agradecerle su acogida.
Si alguna vez os cruzáis con su barba y su andar despreocupado en San Cristóbal no dudéis en saludarlo, seguro que os invita a jugar a Póker, a caminar un rato o a hablar de fotografía.
Lo dicho Mac, cuídate y te esperamos en Barcelona.